Licencia de uso y reprodución

El contenido de las biografías publicadas en este Diccionario Biográfico de la Guadalajara contemporánea es propiedad de sus autores, cuyo nombre aparece al pie de cada texto.
Los textos y las imágenes que los acompañan se publican en el blog bajo licencia Creative Commons, que autoriza a copiar y distribuir su contenido, con o sin modificaciones, para uso público o privado, siempre que no se use para fines comerciales y que se cite a los autores y la fuente de procedencia.
Archivo:CC-BY-NC-SA.png

sábado, 16 de diciembre de 2017

BONIFACIO FERNÁNDEZ DE CÓRDOBA MARTÍNEZ

FERNÁNDEZ DE CÓRDOBA MARTÍNEZ, Bonifacio
[Molina de Aragón, 5 de junio de 1787 – Madrid, 8 de marzo de 1868]

Bonifacio Fernández de Córdoba Martínez nació en Molina de Aragón el día 5 de junio de 1787 y falleció en Madrid el 8 de marzo de 1868. Era hijo de Juan Fernández de Córdoba Sánchez de RIvas y de Dominica Martínez Martínez; su padre había nacido en Alustante, también en el Señorío, y ejerció de notario en la ciudad de Molina de Aragón, donde había nacido su madre, y allí se destacó como uno de los reformadores de las normas de funcionamiento del Señorío molinés en las últimas décadas del siglo XVIII.
Contrajo matrimonio con Josefa Astiguieta Guerra, que había nacido en Mariana de Caracas (Venezuela) en 1796, hija de padres españoles: José Bernardo de Astiguieta, natural de Foronda, en Álava, y Jerónima Guerra, de Granada. Falleció en Madrid el 28 de enero de 1865. No tuvieron hijos.
En América Central
El estallido de la Guerra de la Independencia impidió que, como había hecho su padre, pudiese seguir los estudios de Leyes, y como consecuencia lógica del ambiente bélico que vivía España, ingresó en el ejército. El 2 marzo de 1809 era subteniente de la Comandancia Militar de Cuenca, provincia a la que entonces pertenecía el Señorío de Molina, participando en algunas acciones de guerra. A partir de octubre de 1810, tras el descalabro del ejército español ante los soldados napoleónicos, pasó a América Central, estableciéndose como secretario de la Subinspección General de Tropas de Guatemala. En el año 1813, al comenzar las guerras de emancipación de las colonias americanas, abandonó los puestos administrativos y asumió el mando directo de tropas, primero como teniente y capitán de los Dragones de Sonsonate (El Salvador) y luego como máxima autoridad en San Antonio de Chiapas (Méjico), donde además de ostentar la jefatura militar fundó la Sociedad Económica de Amigos del País de San Cristóbal de las Casas (Méjico).
Una vez que las naciones americanas consiguieron su independencia, siguió viviendo en aquel continente, pero entregado a sus asuntos particulares. Entre 1823 y 1828 residió en Méjico, ayudando a María Ana Gómez de la Cortina, condesa de Cortina, en la administración de su hacienda en ultramar. Ya de vuelta a la península, desde 1842 siguió colaborando con la condesa cuando ésta decidió abandonar el continente americano y depositar en España sus fondos y sus rentas, pero con el objetivo de establecer en Méjico la orden religiosa, las Hermanas de la Caridad o Hijas de San Vicente de Paúl, actuando Bonifacio Fernández de Córdoba como apoderado de la fundadora en todas las gestiones necesarias y para las que fue requerido, actuando como delegado de los promotores mejicanos antes las autoridades eclesiásticas en España, que el 9 de octubre de 1845 autorizaron el establecimiento de dicha orden en tierras mejicanas.
En España
De regreso a España, en el año 1829, retomó su carrera administrativa. El 17 de noviembre de 1832 fue nombrado Oficial Primero de Fomento y el 6 de julio de 1833 fue designado Secretario de Su Majestad con Ejercicio de Decretos. El 25 de mayo de 1835 alegó una grave enfermedad para ausentarse de la Corte y restablecerse en su tierra natal, quedando cesante desde septiembre de 1836, tras la formación de un gobierno progresista y la plena restauración de la Constitución de 1812.
Concluida su carrera administrativa, comenzó su actividad política ocupando distintos cargos de responsabilidad, siempre identificado con los gobiernos moderados y con la línea más conservadora del liberalismo. El 15 de enero de 1838 la Reina Gobernadora le ascendió a Jefe de Sección del Ministerio de Gobernación y desde marzo de ese mismo año fue Subsecretario del departamento de Fomento, siendo invitado en función de su cargo a la Junta Directiva de la Caja de Ahorros de Madrid que estaba organizándose bajo el impulso de Ramón de Mesonero Romanos y del marqués viudo de Pontejos. Al año siguiente era Contador General de Correos, destino en el que fue cesado el 7 de septiembre de 1840 por la Junta Provisional que dio el poder al general Baldomero Espartero y a los progresistas.
Retomado el poder por los moderados, volvió a ocupar cargos de responsabilidad. En 1843 fue nombrado Jefe Superior de Administración Civil y en 1847 era Gobernador Civil General de Galicia. En el año 1851 fue designado Director General de Establecimientos Penales, cargo en el que se jubiló el 20 de julio de 1853, después de elaborar diversas normas y reglamentos para el más eficaz funcionamiento de los presidios y el cumplimiento de las penas. En reconocimiento a su lealtad y servicios fue nombrado Gentilhombre de Cámara.
Durante los períodos de gobierno del liberalismo más conservador, y muy especialmente en la Década Moderada, obtuvo numerosos títulos, ascensos y recompensas. El 20 de noviembre de 1834 fue nombrado Caballero de la Orden de Carlos III, impugnando más adelante una Real Orden del 23 de noviembre de 1863 en la que se limitaba el cobro de haberes de los caballeros pensionados de la citada Orden, perdiendo en 1865 el pleito por decisión de la reina Isabel II. En 1838 fue nombrado caballero de la Real Orden americana de Isabel la Católica y el mismo año era académico de honor de la Academia de Ciencias Naturales de Madrid, el 17 de diciembre de 1843 fue nombrado académico de honor de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid y desde 1844 era socio del Ateneo Científico, Literario y Artístico de Madrid, ámbitos culturales donde pudo exponer los conocimientos que había adquirido en América Central, en los Estados Unidos de Norteamérica, en Francia y en Inglaterra durante su estancia en estos lugares.

Elección y actividad parlamentaria
Después de aprobarse la Constitución progresista de 1837 se disolvieron las Cortes y se convocaron nuevas elecciones, que en la provincia de Guadalajara ganaron los moderados, aunque hubo muchas dudas y protestas por la limpieza del proceso, pues buena parte de la provincia estaba ocupada o asediada por los carlistas. En cualquier caso, los resultados fueron una clara victoria para el partido moderado, y Bonifacio Fernández de Córdoba fue elegido como senador suplente, aunque no hizo falta que ocupase el escaño.
En las elecciones celebradas el 3 de septiembre de 1844, que supusieron el triunfo de los moderados dentro de la coalición que expulsó al general Baldomero Espartero de la Regencia, fue elegido diputado suplente por la circunscripción de Teruel, vecina a su tierra natal, pero como no se produjo ninguna vacante tampoco fue necesario que se incorporase al parlamento.
Para diciembre de 1846 se convocaron nuevos comicios, de nuevo con un sufragio fuertemente censitario, y Bonifacio Fernández de Córdoba obtuvo el escaño del distrito de Molina de Aragón, triunfo electoral que repitió en 1850 y 1851, En las tres ocasiones, fue proclamado candidato electo con un número muy reducido de votos, que nunca llegó al centenar. En la legislatura de 1846 se excusó por su falta de asistencia a distintas sesiones parlamentarias al encontrarse enfermo, y en 1847 se enfrentó a una viva discusión sobre su capacidad para ser reelegido a causa de su nombramiento como Gobernador Civil de Galicia. Finalmente, causó baja en su escaño el 11 de diciembre de 1847 y fue sustituido por Fernando Urríes Bucarelli.
Mientras estuvo presente en la Cámara Baja fue un diputado muy activo, interviniendo en varias ocasiones en cuestiones de carreteras y con motivo de las impugnaciones a determinadas actas electorales, pues no en vano había desarrollado su carrera administrativa y política en los Ministerios de Fomento y Gobernación.
Del mismo modo, formó parte de diversas comisiones parlamentarias sobre estos mismos asuntos y en alguna otra que tenía una relación más directa con la reina, como las que se establecieron para felicitar a Isabel II en el día de su cumpleaños o para acompañarla al Santuario de Nuestra Señora de Atocha. También se integró en la que se encargó de devolver a los herederos de Manuel Godoy los bienes particulares que le habían sido embargados.
JUAN PABLO CALERO DELSO

No hay comentarios:

Publicar un comentario